Por Manuel Eslava.
Discurso ofrecido durante el acto de certificación como coach en Escuela Europea de Coaching Valencia en marzo de 2020.
Motivación, ilusión, optimismo..
parecen iguales pero no es lo mismo.
Verdad, razón, sinceridad…
tan usadas como iguales a la menor oportunidad.
No es lo mismo ni lo mismo da
usar palabras o expresiones
que quedan muy bien en reuniones
pero si me piden que lo explique no sé ni de qué va.
Que no es lo mismo compromiso que obligación,
preocuparse que ocuparse,
culpar que responsabilizarse,
y nos dijeron, esto se llama Distinción.
Cuando aprendí que había que ser tolerante
me dijeron, no, aceptante;
culparse, no, responsabilizarse.
No fracasas, erras.
¿Sueñas o visionas?
¿Seguro que eres generoso?
¡Madre mia, qué locura!
No sé si quejarme o reclamar,
si escucho la radio o la visión compartida infiere mi egoless.
Me piden que haga una declaración
con empatía
mostrando gratitud
no se qué de la vulnerabilidad
y sin resentimiento
con amor.
Pues creo que lo tengo claro.
Me declaro en rebeldía con lo estándar, con el “siempre ha sido así”.
No tengo la razón, ni sé cuál es la verdad.
Sé que coaching es una locura, rompe con lo estándar, me obliga a reinventarme y a trabajarme y declaro mi amor por él.
Desde hoy, empiezo mi proyecto profesional como coach así que no hay mejor forma de declararme que casarme con él. Por muchos años, espero.
Manuel Eslava junto a compañeros de su promoción del Programa de Certificación en Coaching Ejecutivo de EEC en Valencia.