Ya sea para emprender o para intraemprender (poner en marcha un proyecto dentro de tu propia empresa) las estrategias que los líderes emplean para lograrlo también te pueden venir bien a ti.
1- Aceptar el vértigo
Saltar al vacío con algo rompedor, nuevo, desconocido puede ir asociado con cierta sensación de miedo. Sé consciente de que el miedo te paraliza y puede estar evitando que te pongas en marcha. Pregúntate, ¿miedo a qué?, ¿a perder dinero?, ¿a peder prestigio?, ¿miedo al qué dirán? Descúbrelo para saber quiénes son tus frenos, para dejar de mirar ese café como si la solución estuviera en el fondo de la taza.
2- No estás solo
Comparte tu idea, tus miedos. Declara tu necesidad. Amplía tu círculo de confianza. Deja que tus conocidos, que los conocidos de tus conocidos, sepan tus intenciones y que el boca a boca sea tu aliado. Busca apoyos.
3- Mira lo que falta
Entrénate en mirar a través de las gafas del emprendedor. Filtra tus ideas, tu realidad, tu futuro desde lo que falta, buscando dónde está la oportunidad para ganar, para llegar al éxito. Como insiste Silvia Guarnieri, fundadora de la EEC y master coach, «la mirada del emprendedor se entrena, no es algo genético».
4- Ponte en marcha
Una clave más de Silvia Guarnieri, la de que «con la idea no basta». Hace falta comprometerse para ponerla en marcha. Es necesario asumir riesgos, casarse con la ilusión. No pierdas de vista esta emoción que te embarga cuando te lo imaginas hecho, cuando visualizas tu «futuro deseable». Del cero al diez, ¿cómo de comprometido estás con las acciones y el esfuerzo necesario ?
5- Equivócate
Unas veces se gana, otras se aprende. Dar pasos para hacer realidad un sueño, para ver crecer algo nuevo e inexistente no suele lograrse a la primera. El camino del éxito está jalonado de cambios, de modificaciones, de mejoras, de retoques, de ensayos, pruebas y errores. Emprender es equivocarse . Equivocarse es aprender.
Y tú, ¿cómo vives el viaje del emprendedor?, ¿qué estrategias conoces?, ¿qué has aprendido?, ¿dónde y de qué manera emprendes?, ¿dónde te gustaría hacerlo?, ¿dónde hace falta tu idea?
Ya sea para emprender o para intraemprender (poner en marcha un proyecto dentro de tu propia empresa) las estrategias que los líderes emplean para lograrlo también te pueden venir bien a ti.
1- Aceptar el vértigo
Saltar al vacío con algo rompedor, nuevo, desconocido puede ir asociado con cierta sensación de miedo. Sé consciente de que el miedo te paraliza y puede estar evitando que te pongas en marcha. Pregúntate, ¿miedo a qué?, ¿a perder dinero?, ¿a peder prestigio?, ¿miedo al qué dirán? Descúbrelo para saber quiénes son tus frenos, para dejar de mirar ese café como si la solución estuviera en el fondo de la taza.
2- No estás solo
Comparte tu idea, tus miedos. Declara tu necesidad. Amplía tu círculo de confianza. Deja que tus conocidos, que los conocidos de tus conocidos, sepan tus intenciones y que el boca a boca sea tu aliado. Busca apoyos.
3- Mira lo que falta
Entrénate en mirar a través de las gafas del emprendedor. Filtra tus ideas, tu realidad, tu futuro desde lo que falta, buscando dónde está la oportunidad para ganar, para llegar al éxito. Como insiste Silvia Guarnieri, fundadora de la EEC y master coach, «la mirada del emprendedor se entrena, no es algo genético».
4- Ponte en marcha
Una clave más de Silvia Guarnieri, la de que «con la idea no basta». Hace falta comprometerse para ponerla en marcha. Es necesario asumir riesgos, casarse con la ilusión. No pierdas de vista esta emoción que te embarga cuando te lo imaginas hecho, cuando visualizas tu «futuro deseable». Del cero al diez, ¿cómo de comprometido estás con las acciones y el esfuerzo necesario ?
5- Equivócate
Unas veces se gana, otras se aprende. Dar pasos para hacer realidad un sueño, para ver crecer algo nuevo e inexistente no suele lograrse a la primera. El camino del éxito está jalonado de cambios, de modificaciones, de mejoras, de retoques, de ensayos, pruebas y errores. Emprender es equivocarse . Equivocarse es aprender.
Y tú, ¿cómo vives el viaje del emprendedor?, ¿qué estrategias conoces?, ¿qué has aprendido?, ¿dónde y de qué manera emprendes?, ¿dónde te gustaría hacerlo?, ¿dónde hace falta tu idea?