Las empresas y las emociones, dos mundos pendientes de encontrarse

Hablar de emociones en la empresa es una acción tabú, poco común, que en muchos casos genera incomodidad. Sin embargo, muchas son las empresas que ya apuestan por hacerlo para aprovechar todo el potencial que tiene aunar la emoción del trabajador con su tarea o con los objetivos de la empresa. 

En esta línea conversaron los directores de RRHH de empresas junto a EEC y a Primeum en un desayuno organizado junto a la revista Equipos y Talento y que tuvo lugar el pasado 20 de octubre en Barcelona. 

Los responsables de personas en Nestlé, Epson, Pastas Gallo, Ricoh, Grupo Schibted, Henkel, Freixenet y Grupo Uriach compartieron sus experiencias en este área y los avances que han logrado gracias a la gestión emocional en la empresa. 

En muchos casos, comentaron, el éxito ha venido dando un primer paso fundamental, el de asumir la vulnerabilidad, el de ver que compartir las emociones en la empresa no es una debilidad sino una oportunidad para generar conexión entre las personas. 

En este sentido, Eva López-Acevedo, directora ejecutiva y socia fundadora de Escuela Europea de Coaching, aseguró que "en el mundo empresarial actual preocupa demasiado la vulnerabilidad" pues se interpreta como signo de debilidad "mostrar una emoción, pero es al contrario". En opinión de la experta, es fundamental "saber identificar qué nos pasa para poder abordarlo”. Así, continuó, "el cambio siempre pasa por lo emocional, no por la lógica, para cada acción es necesaria una emoción”.

Joan Díaz, director de Escuela Europea de Coaching en Barcelona, intervino por su parte para para destacar las posibilidades de acción que surjen después de esa identificación. “Las emociones se pueden diseñar y es un reto hacerlo para poder ser más eficientes y tener más éxito”, manifestó. 

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